Yoga
El yoga me da la posibilidad de despertar el observador interno, aquella parte de mí que mira sin juzgar, sólo observa para aprender.
Mucho es lo que se dice o hemos escuchado del yoga, pero ¿sabés realmente de qué se trata?
Hagamos una pequeña introducción
La palabra YOGA tiene raíz sánscrita y significa unión. Unión del cuerpo, la mente y el espíritu, pero también la unión del ser individual con el Universo/Dios. Esto se realiza a través de diferentes técnicas que actualmente son bastante populares.
Lo primero que aprendemos y sentimos en una clase es el trabajo corporal. Se utilizan posturas que trabajan fuerza, flexibilidad y equilibrio; comenzamos a experimentar mayor liviandad y calma. Esta sensación no tiene que ver solamente con “mover el cuerpo”. Las técnicas de yoga siempre trabajan a nivel físico/mental/emocional.
¿Qué quiere decir ésto? Que todo lo que hacemos en clase, mejora esos tres aspectos en simultáneo.
Una de las claves es nuestra forma de respirar. Si pongo mi atención en ella, por ejemplo, mientras me estiro o mientras intento sostener una postura de equilibrio, mi mente empieza a enfocar la atención en el presente, en las sensaciones del cuerpo y, como consecuencia, mis emociones se calman. Es por eso que al final de la clase tenemos un estado de bienestar generalizado. La práctica de yoga es fundamentalmente reconocida por ayudarnos a reducir el estrés, pero trae aún muchos más beneficios que ese: mejora nuestra circulación, el funcionamiento de los órganos, fortalece huesos y articulaciones, etc.
Pero eso no es todo. A partir de que avanzamos con el registro del cuerpo comenzamos a profundizar en la respiración y en el control de ella y esto nos permite gestionar aún mejor nuestras emociones y mejorar la concentración, los niveles de atención y memoria.
¿De qué me sirve gestionar mis emociones?
Me sirve para sentirme emocionalmente más estable, se va desarrollando una inteligencia emocional a partir de la calma y la introspección, vamos comprendiendo qué cosas nos hacen reaccionar, qué situaciones nos estresan, etc.
Comenzamos a realizar cambios de actitud frente a la vida. El autoconocimiento se trata de eso: de encontrarme con mis puntos fuertes y débiles, para trabajar lo que haga falta e ir creciendo como persona. A medida que la práctica avanza, vamos teniendo momentos más largos de concentración, introspección y, por último, la meditación.
Entonces ¿por qué practicar yoga?
Porque el yoga es una disciplina integral que nos brindará un cuerpo sano, una mente clara y una emocionalidad estable.
¿Hay diferentes estilos de yoga? ¿Cuál me conviene?
Existen muchos métodos y estilos aunque el Yoga sea uno solo y tenga siempre la misma finalidad.
Cuando hablamos de estilos, me refiero a un estilo más dinámico (series de posturas secuenciadas realizadas a cierto ritmo) o algo más estático (cuando sostenemos, quietos, la postura). Yo recomiendo el primero para gente más inquieta o para quienes necesiten activar su energía. El segundo, para quienes buscan algo más tranquilo, más introspectivo, nos permite disfrutar cada respiración y postura al máximo. También si tenemos contracturas, dolores o lesiones es más conveniente.
Además de diferentes estilos, les decía que existen varios métodos. Estos provienen de diferentes linajes y maestros. Son concepciones, no solo formas de dar una clase. Por ejemplo, habrá métodos, como el Hatha Yoga, que hacen énfasis en la postura perfecta, en el cuidado y la purificación del cuerpo como vehículo del alma, y para ellos el camino de desarrollo del Ser va por ahí. Para otros, como el Bhakti Yoga, el camino es a través de la devoción, la meditación o los mantras, y así.
¿Qué das vos?
Yo adhiero a la concepción del Yoga Integral de Sri Aurobindo, aunque me he nutrido de muchas otras prácticas. Recomiendo mucho los textos sobre pranayama y asanas del yogui y médico Sivananda, los libros del maestro Yogananda (para empezar el de “Autobiografía de un Yogui”) y los de Vishnudevananda sobre meditación y mantras.
Tal vez también te pueda interesar Yoga y Sonido, donde la voz se utiliza como un instrumento de auto armonización, meditación y transformación.
¿Qué características tiene el Yoga integral o Purna yoga?
Aurobindo tomó las técnicas de los principales métodos de yoga de la época y los fusionó. Anteriormente, cada método hacia hincapié en una sola de estas herramientas (lectura de textos sagrados, posturas, meditación, etc.) y acá se unificaron. Entonces, en una clase, tengo la libertad de adaptar no solo el nivel de dificultad según las posibilidades de cada practicante, sino que además las técnicas también van a ser las indicadas según el trabajo que cada grupo esté haciendo.
A lo largo de estos años, con algunos grupos hemos armado clases más intensas físicamente, con otros más suaves, con otros meditamos mucho, con otros casi nada, y así. Todo es yoga pero el camino no es el mismo para todxs. Una forma de universalizar el yoga es poder integrar herramientas en una clase de Yoga Integral y utilizar aquella que resuene con cada ser humano con quien me toque compartir una clase.
¡Se están preparando nuevas actividades!
Seguime en las redes sociales para enterarte de las novedades.
Reservá ahora tu clase de Yoga

- Chacabuco 1360, San Luis
- contacto@paulasantiago.com.ar
- +54 9 266 486 4956
- L-V 10 a 12 y 15 a 20 hs